Apellido Pérez
11 El Espíritu de Cristo estaba en los profetas, diciendo por adelantado sobre los sufrimientos de Cristo y sobre la gloria que seguiría a esos sufrimientos. Los profetas trataban de enterarse de lo que el Espíritu les mostraba, de cuándo sucederían esas cosas y de cómo sería el mundo en ese momento.
11 Querían saber cuándo llegaría esa salvación. El Espíritu de Cristo en ellos les estaba diciendo sobre los sufrimientos de Cristo que iban a venir. También les decía sobre la gloria que vendría.
Juego de cartas Pedro
Simón Pedro, también conocido como Cefas (Juan 1:42), fue uno de los primeros seguidores de Jesucristo. Fue un discípulo franco y ardiente, uno de los amigos más cercanos de Jesús, un apóstol y una “columna” de la iglesia (Gálatas 2:9). Pedro era entusiasta, de carácter fuerte, impulsivo y, a veces, descarado. Pero, a pesar de todas sus virtudes, Pedro tuvo varios fallos en su vida. Sin embargo, el Señor que lo eligió continuó moldeándolo para que fuera exactamente quien Él quería que fuera.
Simón era originario de Betsaida (Juan 1:44) y vivía en Cafarnaúm (Marcos 1:29), ambas ciudades en la costa del Mar de Galilea. Estaba casado (1 Corintios 9:5), y él, junto con Santiago y Juan, eran socios de un rentable negocio de pesca (Lucas 5:10). Simón conoció a Jesús a través de su hermano Andrés, que había seguido a Jesús después de oír a Juan el Bautista proclamar que Jesús era el Cordero de Dios (Juan 1:35-36). Andrés fue inmediatamente a buscar a su hermano para llevarlo a Jesús. Al encontrarse con Simón, Jesús le dio un nuevo nombre: Cefas (arameo) o Pedro (griego), que significa “roca” (Juan 1:40-42). Más tarde, Jesús llamó oficialmente a Pedro para que le siguiera, produciendo una pesca milagrosa (Lucas 5:1-7). Inmediatamente, Pedro lo dejó todo para seguir al Señor (versículo 11).
Significado de Pedro en español
Pedro sigue respondiendo a las burlas de los falsos maestros que trabajaban entre los cristianos de la iglesia primitiva. Preguntan: “¿Dónde está esa venida que prometió Jesús?”. Enseñan que ha pasado demasiado tiempo; Cristo no viene. No resistan la inmoralidad; no habrá juicio. En el versículo 8, Pedro insta a sus lectores a recordar que el Señor no está limitado por el tiempo humano. Para Dios, mil años son como un día y viceversa. El punto de Pedro es que Dios no sufre las limitaciones del tiempo, o la confusión sobre el mismo, como lo hacen los seres humanos.
En este versículo, Pedro insiste en que no podemos aplicar las exigencias humanas sobre el tiempo a las promesas de Dios. Él no tarda en cumplir su promesa. Dios es el que hizo el calendario: No puede “retrasarse”. En cambio, Dios cumple cada promesa en el momento perfecto para su gloria y para el bien de los que ama.
En este caso, los cristianos deberían ver el retraso en el regreso de Cristo como una evidencia de la paciencia de Dios, no de su tardanza. En su paciencia impulsada por el amor, Dios está dispuesto a dar más tiempo para que más personas se arrepientan. Este es el plan de Dios para permitir que más personas tengan la oportunidad de poner su confianza en Cristo para entrar en una relación eterna con Él.
Pedro behind the name
Origin: a primary preposition denoting (fixed) position (in place, time or state), and (by implication) instrumentality (medially or constructively), i.e. a relation of rest (intermediate between 1519 and 1537)
day, i.e. (literally) the time space between dawn and dark, or the whole 24 hours (but several days were usually reckoned by the Jews as inclusive of the parts of both extremes); figuratively, a period (always defined more or less clearly by the context)
Is. 30:18- 18But the LORD will wait to have mercy on you, and therefore he will be exalted in having mercy on you: for the LORD is a God of judgment: blessed are all they that wait for him (Is. 30:18).
Ro. 2:4-5- 4Or do you despise the riches of his kindness, and fhfifhfi ignorant that his kindness leads you to repentance? 5But because of your hardness and unrepentant heart, you treasure up for yourself wrath for the day of wrath and the manifestation of the righteous judgment of God.
Matt. 24:37-39- 37But as the days of Noah were, so shall also the coming of the Son of man be. 38For as in the days that were before the flood they were eating and drinking, marrying and giving in marriage, until the day that Noah entered into the ark, 39And knew not until the flood came and took them all away, so shall also the coming of the Son of man be. (Mt. 24:37-39)