Salmo 112 biblia católica
Añadido. Esta es una forma habitual de denunciar la venganza, Rut i. 17. Los babilonios son amenazados con los juicios de Dios, ver. 4. Algunos ponen estas palabras en boca de Dios, respondiendo a los cautivos. ¿Cómo seréis protegidos de las flechas de la detracción? No temáis. El agudo, &c. (Calmet) — ¿Qué castigo es suficientemente grande para este pecado? (Worthington)
— ¿Cómo castigará Dios la desviación? Lanzará sus dardos contra los culpables, Habacuc iii. 11. (Calmet) — Esta es su recompensa, (Berthier) y lo que merecen. (Worthington) — La caridad y el buen ejemplo son los que mejor contrarrestan su nefasta influencia. (San Agustín)
Pacíficos. En hebreo, “Yo hablé pacífico, y ellos belicoso”. (San Jerónimo) — Literalmente, “Yo era pacífico, y cuando hablaba, ellos volaban a la guerra”. (Haydock) — Causa. Esto se entiende fácilmente por el contexto, (Berthier) aunque no se expresa en el original. (Haydock)
Salmo 91 biblia católica
Este estudio bíblico sobre el Salmo 119 contiene esquemas, amplias referencias cruzadas, preguntas de discusión para el estudio bíblico, lecciones para aprender y aplicaciones. Visite nuestros estudios bíblicos inductivos para más estudios sobre este y otros libros de la Biblia.
Resumen-La Palabra de Dios nos trae su bondad y salvación. Si confiamos en ella, podremos responder a los que nos reprochan. Su Palabra de verdad no debe apartarse de nuestra boca, sino que debemos esperarla. Nuestra obediencia a ella debe ser continua. De hecho, ¡la obediencia nos libera! Mientras hablemos Su Palabra, no debemos sentir vergüenza ante nadie. Nuestro amor por Sus mandamientos debe ser tan grande que los recibamos con avidez, nos deleitemos en ellos abiertamente y los meditemos constantemente.
8 “Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él de día y de noche, para que cuides de hacer conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás próspero tu camino, y entonces tendrás éxito.
21 “En cuanto a mí, éste es mi pacto con ellos”, dice el SEÑOR: “Mi Espíritu que está sobre ti y mis palabras que he puesto en tu boca no se apartarán de tu boca, ni de la boca de tu descendencia, ni de la boca de la descendencia de tu descendencia”, dice el SEÑOR, “desde ahora y para siempre.”
Salmo 120 biblia católica
Su versión está en “lenguaje tradicional” pero he creado una versión en lenguaje contemporáneo de su obra que puedes encontrar en una página web que he creado para proporcionar recursos para el Oficio Diario: Documentos de la Compañía de Voces (desplácese hasta el final de la página para encontrar la carpeta titulada Salmo 119).
Durante siglos, el Salmo 119 alimentó la oración de los que rezaban el Oficio Divino, proporcionando en su recitación diaria (a primera, a tercera, a sexta y a ninguna) un ancla fija, un lugar de seguridad, un verdadero refugio al que regresar de los rigores del ministerio diario en cualquier situación en la que se encontraran los cristianos. En Common Worship: Daily Prayer, se anima a “romper el día” con pausas para la “Oración durante el día” y tal vez incluso a experimentar con puntuar el día más a menudo con momentos de oración.
Creo que el Salmo 119 es una oración de contemplación y obediencia. Desarrollará en quienes lo recen una sencilla dependencia de Dios en cada momento de la vida. A diferencia de otros salmos más populares, este salmo no capta nuestras emociones ni acapara nuestro entusiasmo. Es la familiaridad la que desarrollará el cariño y el reconocimiento de la profundidad. Una profundidad que San Agustín de Hipona, al escribir sobre este salmo, describió como una “profundidad que pocos pueden comprender” (Boulding 2003, p.342).
Salmo 119 esv
El Salmo 119 es el salmo número 119 del Libro de los Salmos, que comienza en el inglés de la versión King James: “Bienaventurados los incólumes en el camino, los que andan en la ley del Señor”. El Libro de los Salmos se encuentra en la tercera sección de la Biblia hebrea, los Jetuvim, y es un libro del Antiguo Testamento cristiano. El salmo, que es anónimo, se conoce en hebreo por sus palabras iniciales, “Ashrei temimei derech” (“felices aquellos cuyo camino es perfecto”). En latín, se conoce como “Beati inmaculati in via qui ambulant in lege Domini”[1].
El salmo es un himno y un poema acróstico, en el que cada serie de ocho versos comienza con una letra del alfabeto hebreo. El tema de los versos es la oración de quien se deleita en la Torá, la ley sagrada, y la vive. Los salmos 1, 19 y este salmo pueden denominarse “los salmos de la Ley”[2][3].
En el sistema de numeración ligeramente diferente utilizado en la Septuaginta griega y la Vulgata latina de la Biblia, este salmo es el Salmo 118. Con 176 versos, el salmo es el más largo y el capítulo más largo de la Biblia.